¿Tenes una rutina de cuidado facial para cuidar tu rostro? Actualmente todos y todas somos conscientes de lo necesario que es cuidar cada parte de nuestro cuerpo para mantenernos saludables y la piel de nuestro rostro no debe ser la excepción.
En el pasado solo una crema era necesaria para cuidar nuestra carita, pero con el paso del tiempo nos hemos dado cuenta que existen muchos tipos de piel y una sola crema no funciona para todas.
Con el paso de los años y el avance de los productos cosméticos y dermatológicos, hemos aprendido que existen diferentes tipos de pieles, además se han desarrollado diferentes productos para cada una.
Tipos de piel
Normal
Se considera que una persona tiene piel normar cuando no es demasiado seca o demasiado grasa, los poros son finos y de textura suave.
Grasa
Las personas con este tipo de piel suelen tener exceso de producción de grasa en la zona T (frente, barbilla y mentón), tendencia al acné y dificultad para controlar el brillo en su rostro.
Seca
La piel seca es muy fácil de identificar, las personas que sienten tirantez, rigidez o resequedad en todo o algunas partes del rostro pueden considerarse con piel seca.
Mixta
Decimos que una persona tiene piel mixta cuando tiene dos o más tipos de piel en su rostro, puedes tener la zona T grasa pero las mejillas secas, o algunas partes de su piel son sensibles.
Sensible
Este tipo de piel también es fácil de identificar, por lo general son pieles con hiperreacción al sol, el agua salada, el frío, productos cosméticos o cremas les generas erupciones o irritación.
Rutina básica de cuidado facial
Una de las tendencias que llegó para quedarse es la de las rutinas de skincare o “cuidado de la piel”.
Llevar a cabo una rutina de cuidado facial puede parecer complicado pero aquí te explicaremos lo sencillo que es comenzar a cuidar tu rostro.
Las rutinas de cuidado facial se pueden adaptar dependiendo del tipo de piel que tengas, sin embargo, estos pasos básicos del skincare no pueden faltar en tu día a día si quieres lucir un rostro limpio y radiante.
Desmaquilla
Si usas maquillaje es de vital importancia que desmaquilles tu rostro diariamente, no vayas a la cama sin haberlo hecho ya que esto maltratará mucho tu piel.
Puedes utilizar un desmaquillante bifásico o un agua micelar que te ayudarán a remover el maquillaje y la suciedad acumulada en tu piel a lo largo del día.
- Limpia
La limpieza es un paso muy importante de tu rutina, puedes buscar un limpiador que se adapte a tu tipo de piel, puede ser una espuma limpiadora, un gel espumoso o un jabón para rostro.
Después de desmaquillarte lava perfectamente tu rostro y enjuágalo con agua tibia.
- Exfolia (opcional)
Una o dos veces máximo por semana exfolia tu rostro con un producto que sea gentil con tu piel pero que al mismo tiempo te ayude a retirar todas las células muertas de tu carita.
Este paso es opcional y para algunas pieles puede resultar agresivo, prueba hacerlo una vez por semana.
- Tonifica
Es importante que equilibres el ph de tu piel con un tónico, suero, emulsión o mascarilla que regule la acidez que puede aparecer, pregunta a un experto qué tónico es ideal para tu tipo de piel.
- Humecta
La humectación es un paso fundamental en cualquier rutina de cuidado facial, la crema humectante es la responsable de sellar la hidratación y propiedades que aporten a tu piel los tónicos, sueros o emulsiones que le apliques y así sus efectos se mantengan en tu piel.
- Protege
Para dar el toque final a nuestra rutina de cuidado facial debemos proteger nuestro rostro de los rayos ultravioleta por lo que te recomendamos no salir sin aplicar protector solar.
Sumar un protector solar a tu rutina de cuidado facial te ayudará a prevenir manchas, envejecimiento prematuro y otros padecimientos como cáncer en la piel.
En Zermat tenemos todo lo necesario para que empieces tu rutina de cuidado facial hoy mismo, entra aquí para conocer la gran variedad de productos que tenemos para todo tipo de piel.
